Se presume inocente es una serie dramática y de suspenso legal producida por Apple TV+, basada en la exitosa novela de Scott Turow publicada en 1987, que ya fue adaptada en cine en 1990. Esta nueva versión, protagonizada por Jake Gyllenhaal, se reinventa con una narrativa moderna, más introspectiva y centrada en el conflicto psicológico y moral que enfrenta su protagonista. Bajo la producción ejecutiva de David E. Kelley, conocido por sus dramas legales como The Practice y Big Little Lies, la serie combina el thriller judicial con una exploración profunda del carácter humano.
Trama
La historia gira en torno a Rusty Sabich, un fiscal de distrito adjunto que se convierte en el principal sospechoso del brutal asesinato de su colega y ex amante, Carolyn Polhemus. Lo que comienza como una investigación criminal se transforma rápidamente en una lucha por su vida, su reputación y su familia. El caso desata un escándalo mediático que expone secretos íntimos, rivalidades políticas y las complejidades del sistema judicial.
Jake Gyllenhaal ofrece una actuación potente y matizada como Sabich. Su personaje se mueve entre la autodefensa racional y la culpa emocional, mientras el espectador duda constantemente de su inocencia. ¿Es un hombre acusado injustamente, víctima de un sistema despiadado? ¿O un manipulador calculador que ha perdido el control de su doble vida? La serie no entrega respuestas fáciles, sino que construye la tensión desde la ambigüedad moral.
Producción
La producción se destaca por su tono sobrio, la cinematografía cuidada y un ritmo narrativo que, aunque pausado, mantiene la tensión emocional con eficacia. La ambientación oscura y elegante refuerza la atmósfera de sospecha y presión constante. Cada escena parece cargada de silencios, gestos reprimidos y miradas que dicen más que los diálogos. El guion se apoya en una estructura sólida, con flashbacks bien integrados que van desvelando lentamente el pasado de Sabich y sus vínculos con la víctima.
Uno de los aspectos más fuertes de -Se presume inocente- es su retrato del sistema legal: no como un mecanismo infalible de justicia, sino como un campo de batalla político y emocional. Los procedimientos, las estrategias y las manipulaciones legales muestran una realidad en la que ganar importa más que la verdad. Además, el conflicto entre lo público y lo privado —la vida familiar de Sabich frente a su rol en el tribunal— añade una capa íntima que humaniza el drama.
En definitiva
La serie también plantea preguntas sobre la lealtad, el perdón y la confianza: ¿puede una familia sobrevivir cuando todo lo que creía saber se pone en duda? ¿Hasta dónde llega el amor cuando la duda entra por la puerta?
Se presume inocente es un drama elegante, tenso y emocionalmente complejo, que no solo entretiene, sino que también incomoda. Una serie que, como su título indica, nos recuerda que entre la inocencia y la culpa existe un abismo… y a veces, ese abismo se parece mucho a uno mismo.
Disponible con una suscripción de Apple TV+
Calificación: ⭐⭐⭐⭐
