Siguiendo el sendero de las películas que dieron vida al formato de dibujos animados, también tuvimos la oportunidad de disfrutar de está producción, qué en lo personal pensé que me iba a defraudar, pero la verdad es qué llenó todas mis expectativas.
Sipnosis
Aladdin (Mena Massoud) es un ladronzuelo que se enamora de la hija del Sultán, la princesa Jasmine (Naomi Scott). Para poder conquistarla aceptará un desafío de Jafar (Marwan Kenzari). Aladdín tendrá que entrar en una cueva en mitad del desierto y conseguir una lámpara mágica que contiene al Genio (Will Smith) que será el encargado de concederle todos sus deseos.
Llena de increíbles y espectaculares efectos especiales. Quizás lo mejor de la película es la fabulosa caracterización del genio de la lámpara interpretado por: (Will Smith).
El trabajo de coreografía supera con creces a la versión animada, pero también está el carisma que impregna el personaje, con ese gran sentido del humor, bromista en cada ocasión, pero con actitudes nobles y comedidas, dispuesto a orientar a su amo cuando este lo permita, o a sufrir las impertinencias de cualquier dueño que se aproveche de la lámpara.
Para mí, la mejor escena, es la del primer deseo, que al igual que en su versión animada, es lo mejor de ambas producciones.
Estuvo muy criticada por parte del sector especializado, y es la razón por la cuál no le di una oportunidad en su momento.
Ahora bien, si te gustó la versión animada, no puedes dejar pasar está oportunidad.
Disponible en TV. Y también disponible para suscriptores de Disney Plus.
